Mantenimiento IT: cómo la monitorización 24/7 evitó un parón productivo en una fábrica

Mantenimiento IT: cómo la monitorización 24/7 evitó un parón productivo en una fábrica
Índice de contenidos

En entornos industriales, un problema IT rara vez se queda en un “incidente informático”. Si el ERP se ralentiza, si el servidor de producción no responde o si la red empieza a tener latencia, el impacto se traslada al taller: órdenes que no salen, trazabilidad que se rompe, líneas que se paran y entregas que se retrasan.

Por eso, el mantenimiento IT en industria no puede depender solo de tickets cuando “algo ya va mal”. En este caso práctico verás cómo un servicio de monitorización 24/7 detectó señales tempranas de degradación y permitió actuar antes de que la fábrica entrara en un parón productivo.

Además de la historia, te llevas un enfoque replicable: qué monitorizar, cómo definir alertas accionables y cómo conectar la monitorización con un plan real de mantenimiento preventivo.

Resumen rápido (para decidir en 30 segundos):

  • La monitorización 24/7 detectó degradación de rendimiento en el almacenamiento antes del inicio del turno.
  • Se aplicó contención y corrección remota con procedimientos definidos (runbooks) y escalado.
  • La fábrica inició producción con normalidad, evitando un incidente que habría afectado a ERP, etiquetado y trazabilidad.

Por qué un fallo IT en una fábrica se convierte en un parón productivo

En industria, el IT está pegado a la operativa. No hablamos solo de “ordenadores”, sino de sistemas que sostienen producción, logística, calidad y cumplimiento. Cuando uno cae, suele arrastrar procesos completos.

El problema es que el impacto aparece en cadena: una caída del ERP puede detener picking y expediciones, un fallo de almacenamiento puede bloquear la trazabilidad y un cuello de botella en red puede hacer “inutilizable” una línea que, sobre el papel, sigue encendida.

La clave está en anticiparse. En lugar de actuar cuando ya hay usuarios bloqueados, el mantenimiento IT moderno busca detectar señales de degradación (rendimiento, capacidad, errores) y corregir antes de que el negocio lo note.

Qué entendemos por monitorización 24/7 dentro del mantenimiento IT

La monitorización 24/7 es la capacidad de medir y analizar, de forma continua, el estado de sistemas críticos (servidores, red, almacenamiento, aplicaciones y servicios) para detectar anomalías y responder a tiempo. No es “mirar gráficos”: es convertir señales técnicas en decisiones operativas.

En la práctica, una monitorización bien diseñada para entorno industrial combina disponibilidad y rendimiento, con alertas orientadas a impacto y un proceso claro de escalado. El objetivo es simple: reducir el riesgo de paradas y acortar drásticamente el tiempo de respuesta.

Si quieres ver cómo lo planteamos como servicio, aquí tienes nuestra página de monitorización 24/7 para empresas.

Normalmente, incluye:

  • Supervisión de disponibilidad (¿está arriba?) y rendimiento (¿va bien?).
  • Alertas por umbrales y por comportamiento (cuando algo “se sale” de lo normal).
  • Gestión de escalados (quién actúa, cuándo y cómo).
  • Informes para mantenimiento preventivo (evitar repetir el mismo susto).

El contexto del caso: una fábrica con IT híbrida y operativa por turnos

Este caso se basa en un escenario muy habitual: una planta con turnos, picos de uso al inicio de producción y dependencia alta de sistemas de gestión y trazabilidad. No entraremos en marcas ni configuraciones específicas, porque lo importante es el patrón de riesgo y cómo se evita.

Entorno simplificado para entender el impacto:

  • ERP y base de datos para órdenes de fabricación, inventario y expediciones.
  • Servidor de ficheros para documentación de calidad, planos y registros.
  • Infraestructura virtualizada con almacenamiento compartido (SAN/NAS).
  • Red segmentada (oficina/producción) y servicios de impresión/etiquetado.
  • Backups nocturnos y tareas programadas de mantenimiento.

La empresa ya contaba con un esquema de mantenimiento IT 24/7, y la monitorización actuaba como “radar” para detectar problemas antes de que afectaran al turno.

El incidente: cómo la monitorización 24/7 detectó el problema antes del turno

La clave de este caso no es que “hubo una avería”, sino que el sistema empezó a degradarse de forma progresiva. Esa degradación es invisible si solo miras “si funciona o no”, pero aparece con claridad cuando monitorizas métricas críticas y sus tendencias.

1) La señal temprana: latencia creciente en el almacenamiento

Horas antes del inicio del turno, la monitorización detectó un patrón: la latencia de escritura del almacenamiento subía durante tareas nocturnas y no volvía a su línea base. No era un pico puntual, sino un síntoma de degradación.

En una fábrica, esto suele traducirse en síntomas muy concretos cuando entra producción:

  • ERP lento o con bloqueos intermitentes.
  • Etiquetado que tarda en imprimir o se queda en cola.
  • Usuarios “reiniciando” aplicaciones, empeorando la situación.
  • Riesgo de corrupción si hay cortes o reinicios forzados.

2) La alerta accionable: correlación con consumo anómalo y tareas programadas

La alerta no era un aviso genérico de “CPU alta” o “disco al 90%”. Estaba diseñada para correlacionar señales: latencia + cola de I/O + crecimiento anómalo de logs + poco espacio libre en una partición crítica. Eso permitió acotar la causa sin perder tiempo.

El origen fue doble: una rotación de logs fallida y un crecimiento de ficheros temporales que estaban forzando escrituras masivas en la ventana nocturna. El sistema aún “respondía”, pero ya se estaba preparando el desastre del turno.

3) La actuación: contención y corrección antes de producción

Con el aviso, el técnico de guardia siguió un runbook definido: contención primero (estabilizar) y corrección después (eliminar la causa). Esto evita improvisación y reduce el tiempo hasta volver a niveles normales.

  • Se liberó espacio y se corrigió la política de rotación para evitar crecimiento recurrente.
  • Se ajustó la tarea programada que estaba disparando escrituras masivas en el peor momento.
  • Se validó que la latencia volvió a valores normales antes del inicio del turno.

Resultado: el turno arrancó con normalidad. Lo más importante es lo que no pasó: no hubo caída del ERP, no se detuvo el etiquetado y la trazabilidad se mantuvo intacta.

Qué se estaba monitorizando exactamente (y por qué funcionó)

La monitorización 24/7 funciona cuando se diseña pensando en servicios críticos del negocio, no solo en “máquinas”. En este caso, lo monitorizado estaba directamente alineado con lo que, si falla, para producción.

Bloques de monitorización que marcaron la diferencia:

  • Almacenamiento: latencia, IOPS, cola, espacio libre, errores de disco, tendencias de crecimiento.
  • Virtualización y servidores: salud del host, RAM/CPU sostenida (no picos), snapshots, estado de servicios.
  • Bases de datos y ERP: disponibilidad, tiempos de respuesta, colas y eventos.
  • Red: latencia, pérdida, puertos saturados, errores, estado de VLANs y enlaces críticos.
  • Servicios de operación: impresión/etiquetado, colas, accesos a carpetas de producción.

Este enfoque se vuelve especialmente potente cuando se combina con un modelo de soporte y escalado. Si tu empresa está valorando reforzar su control operativo, puede encajar con outsourcing IT para empresas.

Cómo diseñar una monitorización 24/7 que realmente evite paradas

Muchas empresas “monitorizan”, pero no evitan incidentes porque fallan en lo esencial: alertas mal definidas, exceso de ruido, falta de escalado o ausencia de procedimientos. La monitorización 24/7 debe ser operativa, no decorativa.

Define servicios críticos y su “normalidad”

Antes de hablar de herramientas, hay que responder: ¿qué procesos no pueden parar? A partir de ahí se define la línea base (qué es normal) y qué se considera degradación. Sin línea base, todo parece “normal” hasta que ya es tarde.

  • Qué servicio afecta directamente a producción.
  • Qué métricas anticipan el fallo (no solo las que lo confirman).
  • Qué umbrales o patrones disparan acción real.

Convierte alertas en acciones (menos ruido, más criterio)

Una buena alerta debe responder a dos preguntas: “¿qué impacto tiene?” y “¿qué hago ahora?”. Si un aviso no lleva a una acción clara, se ignora con el tiempo. Y cuando llega el incidente, ya nadie confía en las alertas.

  • Alertas por impacto (servicio) y por causa (recurso).
  • Ventanas de mantenimiento para reducir falsos positivos.
  • Correlación de eventos para no saturar al equipo.

Define escalados y runbooks antes del problema

La diferencia entre un susto y un parón suele estar en minutos. Esos minutos se ganan con escalado claro y procedimientos escritos: quién actúa, cuándo se contacta a IT interno, y cuándo se detiene una tarea o se cambia una ventana.

Integra la monitorización con mantenimiento preventivo

Si cada alerta se cierra “apagando fuegos”, el riesgo vuelve. El valor real llega cuando el histórico se traduce en acciones preventivas: revisión de tareas nocturnas, políticas de limpieza, planificación de capacidad y mejoras de estabilidad.

Para una visión completa del enfoque, enlaza con nuestro artículo pilar: mantenimiento informático para garantizar la operatividad.

Cómo calcular el coste evitado y justificar la inversión

No necesitas cifras perfectas para tomar una decisión, pero sí un método. La forma más útil para dirección es estimar el coste por hora de parada y multiplicarlo por el tiempo que la monitorización te ayuda a evitar (o a reducir).

Método práctico para entornos industriales:

  • Coste de parada/hora: producción no servida + personal parado + urgencias + penalizaciones.
  • Horas evitadas: tiempo que habría durado el incidente sin detección temprana.
  • Costes indirectos: reprocesos, pérdida de trazabilidad, scrap, reputación.

En muchos casos, la monitorización 24/7 se amortiza evitando uno o dos incidentes relevantes al año. Y, sobre todo, aporta previsibilidad: menos sobresaltos y más control sobre la continuidad operativa.

Checklist rápido: señales de que tu fábrica necesita monitorización 24/7

Si te suenan varios puntos, es probable que estés más cerca de una parada de lo que parece. Este checklist ayuda a priorizar qué atacar primero dentro del mantenimiento IT.

  • El ERP “va lento” a primera hora o justo después de backups nocturnos.
  • Las impresoras de etiquetas fallan o se quedan colas bloqueadas.
  • El almacenamiento va justo de capacidad y se amplía “cuando se puede”.
  • Hay tareas programadas sin control (scripts, limpiezas, exportaciones).
  • No existe guardia real o el escalado es improvisado.
  • Los incidentes se detectan por usuarios, no por alertas.
  • No hay histórico para ver tendencias, solo “sensaciones”.
  • La red de planta y oficina se gestiona como si fuera lo mismo.

Cómo te ayuda Inmove IT Solutions a evitar paradas con mantenimiento IT

En IMHO Inmove IT Solutions trabajamos el mantenimiento IT con foco en continuidad operativa: detectar antes, actuar rápido y prevenir que se repita. La monitorización 24/7 es una pieza clave, pero siempre dentro de un modelo con procedimientos, escalado y reporting.

Dependiendo de tu entorno (on-prem, híbrido, multi-sede), podemos ayudarte con:

¿Quieres reducir el riesgo de paradas y tener visibilidad real de tu infraestructura? Cuéntanos tu caso y planteamos un enfoque de monitorización y mantenimiento adaptado a tu operativa.

contactar con Inmove IT Solutions

Preguntas frecuentes sobre monitorización 24/7 en fábricas

Estas dudas aparecen a menudo cuando una empresa industrial quiere profesionalizar su mantenimiento IT sin complicar la operativa. Las respuestas ayudan a alinear expectativas y definir un alcance realista.

¿La monitorización 24/7 sustituye a mi equipo interno de IT?

No necesariamente. Puede funcionar como refuerzo (detección, guardia, escalado) mientras tu equipo se centra en proyectos y mejoras. También puede ser un modelo mixto: vosotros decidís qué se gestiona internamente y qué se externaliza.

¿Qué diferencia hay entre monitorización 24/7 y “tener alertas”?

Tener alertas sueltas suele generar ruido y fatiga. Un servicio de monitorización 24/7 bien diseñado incluye correlación, umbrales por contexto, escalado y procedimientos de actuación para que cada aviso se convierta en una respuesta.

¿Qué se debe monitorizar primero en una fábrica?

Empieza por lo que para producción: ERP/BBDD, almacenamiento, red crítica, servicios de impresión/etiquetado y autenticación. Luego amplías a rendimiento, tendencias, capacidad y eventos para preventivo.

¿La monitorización 24/7 también ayuda en ciberseguridad?

Sí. Aunque el objetivo principal aquí es continuidad, la visibilidad continua ayuda a detectar comportamientos anómalos (picos de consumo, servicios que se detienen, errores repetidos). Como referencia formal, NIST recoge el concepto de “continuous monitoring” en su glosario: Information Security Continuous Monitoring (ISCM).

¿Te gusta? Comparte esta entrada:

Jordi de Lema de Moreta

El trabajo y la vocación de servicio es lo que ha hecho de IMHO una compañía de valor. ¿Cómo podemos ayudarte?

Ver Todas las entradas de Jordi de Lema de Moreta
SOPORTE

¿Necesitas Asistencia?

Nuestro equipo está listo para ayudarte a través de nuestro programa de teleasistencia, ofreciendo soporte remoto para resolver tus problemas rápidamente y mejorar la eficiencia de tus sistemas informáticos.
Equipo profesional de soporte técnico informático

Quizás también te interese...